Desde tiempos inmemoriales, los bares y tabernas son uno de los lugares que más invitan a la conversación. Del cotilleo, los rumores y los contenidos ligeros hasta las declaraciones más pomposas y trascendentales. Todo tiene cabida junto a la barra de bar. La relajación, un ambiente acogedor y una pizca de alcohol… ¡y vuelan las palabras! Las buscadas y las comprometidas.
El dicho “si las paredes hablasen” toma un sentido especial, y literal, en Casa Moreno. Entre latas de conserva y embutidos, los dichos, refranes, chistes o citas comparten estantería mientras un cliente disfruta de uno de los montaditos por excelencia de este lugar, el de roquefort con chorizo picante.
A los turistas sigue sorprendiéndole cruzar la puerta y encontrar una tienda de ultramarino. La que de forma magistral dirige Francisco Moreno. Penetrando con desconcierto, una nueva sorpresa aguarda en la barra-mostrador que está en la trastienda y en la que Emilio y Sonia atienden a los numerosos consumidores que pasan cada día por Casa Moreno.
Emilio Vara Dorado (Sevilla, 1966) regenta la barra de la pequeña trastienda de uno de los pocos ultramarinos que quedan en Sevilla. En la calle Gamazo 7 se encuentra este establecimiento al que han acudido personajes como Curro Romero, Vargas Llosa o Carlos Herrera. De padre periodista y amante de las letras, confiesa que su vocación frustrada es el periodismo. De ahí se entiende la cantidad de notas que recubren sus paredes. Y el cariño con que las custodia…
Los mensajes y los cuadros son visibles desde que se entra en Casa Moreno. Las imágenes de Semana Santa y el mundo del toreo está también presente por todos sus rincones, incluso una pequeña réplica en miniatura de la Torre del Oro.
Curro Romero, Morante de la Puebla o el emergente Pablo Aguado son algunos de los toreros que han pasado por allí y han dejado su sello con su firma y una dedicatoria.
Buena parte de las citas invitan a que sus lectores rían o incluso reflexionen con algunas de ellas. “La vida es muy corta para tomar malos vinos”, “beber vino provoca abrazos y sonrisas, beber cubatas provoca pelea y discusiones” o “la vida es un rato en el bar y ya está”… Son sólo algunas de las sugerentes notas que cubren todos los rincones de Casa Moreno, uno de los bares con más encanto de toda Sevilla. Las demás aguardan, pacientes, que las interprete y haga suyas el próximo cliente de Casa Moreno… Como las buenas historias de los buenos libros.